El
2 de mayo de 1967 el diario ABC de Sevilla publicaba una información sobre un joven torero, Sebastián Palomo Linares,
que hizo una serie de ofrendas a la
Virgen de la Esperanza Macarena y a la Virgen de la Hiniesta, así a la
primera dolorosa le hizo entrega de un traje de luces en color rosa bordado en
oro, con un costurón a la altura de la ingle derecha. Ese traje fue el que
vistió en la plaza de Castellón de la Plana, cuando semanas antes había sido
cogido. Por ese incidente Palomo Linares acudió a la basílica de la Esperanza
Macarena con un bastón y dolorido, abandonando la sede de la hermandad de la
madrugá en vehículo y desplazándose hasta la iglesia de San Julián, donde la
junta de gobierno de la Hermandad de la Hiniesta, según indica la noticia, lo
recibió a las puertas del templo y lo acompañó a los pies del altar,
postrándose el torero ante la Virgen de la Hiniesta y rezándose una salve, dejando el maestro Palomo Linares un capote
de paseo que pensaba haber utilizado en la Feria de Abril de Sevilla, pero
que debido a su incidente en Castellón, no pudo utilizar. El diestro fue
obsequiado con una copa de vino español antes de marcharse de San Julián, en
las dependencias de la Hermandad, en agradecimiento por su ofrenda.
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| Capote de paseo de Sebastián Palomo Linares |
Ese
capote de paseo al que hace referencia esta noticia se conserva en uno de los armarios de vestimentas de la Santísima
Virgen de la Hiniesta y es un bonito recuerdo de este episodio de
generosidad que tuvo Sebastián Palomo Linares, hace cincuenta años, pues la
donación se produjo el 1 de mayo de 1967. Su reciente fallecimiento el pasado
24 de abril, a la edad de 69 años, hace que este entrañable capítulo de su vida
relacionado con nuestra hermandad tenga especial relevancia, como homenaje y
por ser desconocido por muchos hermanos. Elevamos una oración al Santísimo
Cristo de la Buena Muerte y a María Santísima de la Hiniesta Dolorosa por su
alma. Descanse en paz.
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| Detalle del capote de paseo |
Sebastián
Palomo Martínez, nació el 27 de abril de 1947 en la localidad jienense de
Linares, tomando este nombre como denominación artística para su profesión de
torero, Palomo Linares. En este año 1967 cuando hizo la ofrenda a la Virgen de
la Hiniesta del capote de paseo, aún no había pasado un año de su alternativa,
que tuvo lugar en la plaza de toros de Valladolid el 19 de mayo de 1966, ante
el torero Jaime Ostos como padrino y Juan García “Mondeño” como testigo. Este joven Palomo Linares, con veinte años recién
cumplidos y después de tres años dedicándose profesionalmente al mundo del
toro, hizo donación de este capote de paseo, que iba a ser utilizado por el
maestro el 16 de abril de 1967, en una corrida con toros de Núñez Hermanos,
cerrando la terna junto a los maestros Curro Romero y Andrés Hernando y el 19
de abril de 1967 con toros de Doña María Pallares, cerrando también la terna
junto a los diestros Rafael Ortega y Jaime Ostos.
El
capote que está en perfecto estado de conservación está realizado por la famosa
sastrería de toreros Maestra “Nati” de Madrid, como así queda
descrito en la etiqueta del forro de la obra. Está realizado en raso negro fileteado en oro y bordado en
sedas de colores, con flores y tallos de diferentes tonalidades (verdes,
rojos, morados, malvas y amarillos) según las tipologías según las especies. Es
una muestra de la artesanía del bordado tan unida a la vestimenta de los
toreros.
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